Hace 10 días recibí una llamada de un teléfono desconocido y lo cogí (raro en mí). Era alguien de una empresa de software… lo iba a dejar así, pero creo que es mejor hablar claro… era alguien de Opentext que me llamaba para invitarme a un evento el día 27 de noviembre, en el Casino de Madrid.
Le atendí, durante unos 5 minutos, actualizamos mis datos y me dijo que me enviaría inmediatamente un mail de confirmación con todos los datos.
Esta semana, estaba planificando mi agenda, recordé la llamada y que no había recibido el mail. La verdad es que me interesaba el evento, ya que un cliente me había preguntado recientemente por soluciones de gestión documental y pensé que sería interesante ver lo que presentaban.
El caso es que llamé para ver qué pasaba con la confirmación y me dijeron que “lamentablemente, el evento es sólo para clientes, por lo que no hemos podido cursar la invitación”… colgué amablemente y me olvidé del tema. No es la primera vez que me ha pasado algo así, con otras “invitaciones” parecidas.
Y aquí se hubiera quedado de no haber sido porque a los 3 días esa llamada, volvieron a contactar conmigo para lo mismo… es decir, para volver a “invitarme” igual que la primera vez, pero al advertir a mi interlocutora lo que había pasado con su compañera y que era “consultor”, me dijo que lo consultaría (valga la redundancia) y me volvería a llamar… cosa que, evidentemente, no ha hecho.
Y entonces es cuando me pregunto:
- ¿No pueden filtrar los datos antes de hacer las llamadas? El tiempo es valioso, para el que llama y para el que coge la llamada.
- Si no lo has hecho y te has equivocado, ¿qué tiene de malo que vaya un consultor? ¿Que no te va a comprar el producto? Probablemente, pero puede que sea un buen “agente comercial” entre sus clientes.
- Bien, no filtras las llamadas, te equivocas, pero… ¿2 veces en una misma semana? Quizás habría que planificar mejor la campaña de marketing…
Entiendo que el objetivo de las empresas con estos actos es el de “engatusar” a sus clientes o posibles clientes y precisamente por eso, el mismo debe estar claramente identificado.
Evidentemente, todos podemos fallar, pero habría que analizar si una vez que has cursado la invitación a alguien, es más positivo cancelarla o mantenerla.
Yo, por ejemplo, en el encuentro que tengo con mi cliente, la próxima semana, le hablaré de varias soluciones de gestión documental, Opentext entre otras. Probablemente, si hubiera tenido reciente el evento, le hablaría de Opentext y alguna otra… un pequeño matiz, pero importante 😉
PD.- El evento debía ser este: http://www.opentext.es/espana-general/espana-eventos/events-contentdays-madrid.htm